¿Por qué hay algunas plantas de marihuana que son moradas?

Las plantas cuentan con pigmentos naturales y en la mayoría de ellas, el más dominante es la clorofila, que, además de ayudar a las plantas a realizar la fotosíntesis, les da su color verde.

A su vez, las plantas también contienen otros muchos pigmentos activos, entre ellos están los carotenoides y las antocianinas. Cuando hay ausencia de clorofila, pueden usar pigmentos como las antocianinas para absorber la luz solar y realizar la fotosíntesis. Cuando esto ocurre, a diferencia de la clorofila, las antocianinas absorben de manera natural todas las longitudes de onda de la luz del sol, excepto las del tono añil, que son las que le dan a las plantas su color púrpura.

Entonces, las plantas de cannabis violetas (o cualquier planta morada) adquieren su color debido a que el pigmento dominante que contienen sus hojas y sus flores son las antocianinas.

Las antocianinas pertenecen a la familia de los flavonoides. Por lo general, se encuentran en frutas, verduras, cereales, tés y nueces, así como en los cannabinoides y terpenos de las plantas de cannabis.

Los flavonoides tienen diferentes beneficios medicinales:

a- Protege el corazón y el hígado.

b- Mejora la visión y la salud neurológica.

c- Previene la obesidad y la diabetes.

d- Propiedades antioxidantes

e- Propiedades antimicrobianas

f- Propiedades antiinflamatorias

Las antocianinas son pigmentos solubles en agua que están presentes en muchas plantas y son también los encargados de dar a los arándanos su color azul, a las uvas rojas su color rojo y a las moras su color negro. Estas moléculas vienen en una gama de colores que incluyen oro, rojo, verde oscuro, violeta, azul oscuro y negro. La temperatura, la luz, los niveles de pH y la estructura juegan un papel en la determinación del color específico y la estabilidad de sus pigmentos.

Sin embargo, para que esto sea posible, una cepa debe estar predispuesta a volverse púrpura y esto va a depender de su composición genética, porque algunas cepas contienen más antocianinas que otras. Durante el ciclo de floración “invernal”, su predisposición genética junto con factores químicos únicos y su entorno de crecimiento explican la expresión de la pigmentación púrpura.

Para cultivar una cepa púrpura, es necesario elegir una rica en antocianinas. Podés elegir entre estas variedades:

a- Blueberry de BSF seeds

b- Blackberry

c- Purple

d- Purple Haze

e- Purple Trainwreck

f- Purple Kush

Un punto a favor de las bajas temperaturas es que descomponen la clorofila, lo que permite que dominen las antocianinas. Entonces, la exposición de las plantas de cannabis a temperaturas frías puede hacer que las hojas cambien de color. Sin embargo, esto solo sucede con cepas producidas genéticamente para tener un color púrpura. Lo ideal sería hacerlo de forma espaciada y en el momento adecuado, que es justo antes de la cosecha. Lo mejor sería mantener una temperatura nocturna de 10°, pero debe haber una reducción gradual de la misma para evitar chocar las plantas. La exposición al frío extremo puede provocar daños e incluso la muerte de las plantas. Asimismo, si cultivas cepas púrpuras al aire libre y con temperaturas más frías pueden obtener el color sin la necesidad de que intervengan los cultivadores.

Por otro lado, si las antocianinas se exponen a diferentes niveles de pH, su color se puede ver afectado. Por ejemplo, bajo condiciones ácidas, que tienen un pH bajo, las plantas se pueden enrojecer. El pH neutro, por otro lado, generalmente da como resultado un color púrpura. Cuando tienen un pH alto, generalmente resulta en un color azul.

Se cree que estos pigmentos hidrosolubles son potentes antioxidantes que, según dicen, poseen propiedades analgésicas, antiinflamatorias y neuroprotectoras. Además, algunas investigaciones recientes señalan que algunas de ellas tienen cierta afinidad selectiva por los receptores de cannabinoides como los CB1 y los BB2.

No existen actualmente estudios sobre los efectos del consumo de las antocianinas del cannabis en sus consumidores. Pero sí que existen estudios que demuestran que el consumo de alimentos ricos en antocianinas reduce las enfermedades crónicas, las funciones neurológicas, y aumenta el rendimiento y la salud de aquellos que los consumen; especialmente en el caso de las bayas del tipo mora, arándano, frambuesa o baya goji, entre otras. Además, también existen estudios que demuestran que las antocianinas mejoran el funcionamiento del sistema cardiovascular, previenen la obesidad y las enfermedades coronarias, y posee efectos antitumorales, antiinflamatorios y antidiabéticos.

¿Qué partes del cannabis pueden volverse lilas? 

Hay cuatro partes principales:

a- Pistilos: estos son los pelos finos que salen de los cogollos y te permiten saber que son hembras. Al principio suelen ser de color blanco cremoso y, a medida que las plantas maduran, se vuelven anaranjados/rojos/marrones. Pero puede ocurrir que estos se vuelvan rosados o violetas, y este es el color que permanecerá después de cosechar, secar y curar los cogollos.

b- Cálices: Las flores de cannabis están formadas por cientos de estos pequeños cálices apilados uno encima de otro, por lo que estos serían pequeñas bolsitas que dan forma a los cogollos.  A medida que las flores maduran, los cálices se abren y revelan sus pistilos, que están diseñados para atrapar el polen de las plantas de cannabis macho.

c- Hojas: las hojas de abanico y las hojas de azúcar de tu planta de cannabis también pueden volverse púrpuras.

d- Tricomas: que son los cristales diminutos que cubren los cogollos. Estos empiezan siendo transparentes, después se vuelven opacos y más adelante de color ámbar. Sin embargo, también es posible que se vuelvan moradas.

Las plantas púrpuras son algo maravilloso de ver. Si tenés la posibilidad de experimentar y obtener una, no perdés nada por intentarlo.