No importa si hace frío o calor, la torta frita siempre es una buena idea. Esta versión, aparte de ser riquísima, tiene algo de magia.

La torta frita se puede comer sola, con sal o con azúcar, pero si se animan agreguen otros ingredientes. Queda muy bien rellena con jamón y queso, y también con palta y huevo arriba. Para los dulceros, una instada de dulce de leche no falla.

Receta de torta fritas cannábicas

Van a necesitar 250 g. de harina común, 250 g. de harina leudante, 1 cda. de sal, 300 cm3 de agua caliente y 1 y 1/2 cdas. de manteca cannabica.

La mezcla de harinas va a hacer que la torta frita quede un poco inflada. Unimos bien las dos harinas en un bol y dejamos un hueco en el medio, donde agregamos la sal. En el mismo hueco vamos a incorporar 300 cm3 de agua caliente y después la manteca cannabica.

Es clave que el agua este caliente así derrite la manteca y todo se integra más fácil. Unimos bien la mezcla con la mano y la pasamos a una mesada para terminar el amasado. Asegurarse de que todos los ingredientes estén bien unidos.

Acá es el momento de jugar. Si te gustan dulces agregale ralladura de algún cítrico, si te gustan saladas un toque de queso parmesano les queda increíble. Ahora dejamos reposar la masa envuelta en papal film en la heladera por 30 minutos, por lo menos. Cuanto más reposa, mejor sale!

Por ultimo cortamos la masa formando bollitos, los estiramos con palo de amasar dandole forma de tapa de empanada pero un poco más gruesa y por ultimo, le hacemos un agujero en el medio, para que el aceite pase bien por toda la torta frita. Se frien en aceite o grasa y estan listas para comer!