La relación entre la marihuana y testosterona es un tema de interés creciente en la comunidad científica y entre aquellos que exploran los efectos del cannabis en la salud humana.
La marihuana, con sus diversos compuestos activos como el tetrahidrocannabinol (THC) y el cannabidiol (CBD), ha sido objeto de numerosos estudios para comprender su impacto en diferentes aspectos del funcionamiento del cuerpo humano, incluida la producción hormonal.
¿Testosterona que es?
La testosterona, una hormona sexual masculina clave, desempeña un papel fundamental en una variedad de funciones biológicas, desde el desarrollo de características sexuales secundarias hasta la regulación del estado de ánimo y la energía.
A medida que la legalización y la aceptación del cannabis se expanden en todo el mundo, surge un mayor interés en comprender cómo su consumo afecta a la salud hormonal, particularmente en lo que respecta a la testosterona.
Si bien algunos estudios han sugerido posibles vínculos entre el consumo de marihuana y cambios en los niveles de testosterona, los hallazgos han sido variados y a menudo contradictorios.
Estudio sobre el marihuana y testosterona
Un estudio reciente, basado en datos del Examen Nacional de Salud y Nutrición (NHANES) realizado entre los años 2011 y 2016, arrojó luz sobre la relación entre el consumo de cannabis y los niveles de testosterona en hombres.
Este estudio, que incluyó a 5146 participantes masculinos, reveló hallazgos interesantes sobre cómo el cannabis puede influir en la producción de testosterona.
De los hombres incluidos en la encuesta, 3027 habían utilizado cannabis al menos una vez en su vida. Entre estos consumidores, casi la mitad (49,3%) fueron clasificados como usuarios habituales de THC, el principal compuesto psicoactivo del cannabis.
La marihuana baja la testosterona o fumar marihuana aumenta la testosterona
Los investigadores observaron un patrón notable: encontraron un aumento modesto pero significativo en los niveles de testosterona entre los usuarios habituales de THC en comparación con aquellos que no usaban cannabis de manera regular.
Además, se destacó que el aumento en los niveles de testosterona estaba más pronunciado en aquellos consumidores que utilizaban cannabis con mayor frecuencia. Específicamente, los hombres que consumían cannabis dos o tres veces al mes mostraron un aumento significativo en los niveles de testosterona en comparación con los no usuarios.
Los resultados de este estudio sugieren que el uso de THC, el componente activo del cannabis, está asociado con incrementos leves pero notables en los niveles de testosterona en los hombres.
Aunque se observó que este aumento tiende a disminuir a medida que aumenta la frecuencia de consumo de cannabis, los niveles de testosterona siguen siendo más altos en los usuarios regulares en comparación con aquellos que no consumen cannabis en absoluto.
Efectos adversos de la marihuana testosterona
La marihuana, aunque ampliamente celebrada por sus efectos recreativos y medicinales, puede tener impactos negativos en las relaciones sexuales, especialmente en usuarios frecuentes.
Los efectos secundarios sexuales de la marihuana pueden manifestarse como baja energía y libido, influenciados por su efecto en la testosterona y las hormonas hipofisiarias.
¿Qué pasa con los hombres?
Entre los hombres, el consumo frecuente de marihuana se ha asociado con bajo deseo sexual, disfunción eréctil y dificultades en la experiencia del orgasmo. Por otro lado, las mujeres pueden experimentar variaciones en los niveles de progesterona y, en algunos casos, de estrógenos, lo que puede manifestarse como problemas menstruales y depresión.
El uso intensivo y prolongado de marihuana puede exacerbar estos efectos adversos y conducir a otros problemas de salud mental, como episodios de pánico, miedo, deterioro de la memoria e incluso episodios psicóticos.
Además, el consumo compulsivo de marihuana se ha relacionado con un recuento bajo de espermatozoides en hombres y con irregularidades menstruales en mujeres.
Marihuana y testosterona: ¿Qué pasa con el cbd?
Es importante destacar que el cannabidiol (CBD), un componente presente en algunas variedades de cannabis, puede tener efectos diferentes en comparación con el tetrahidrocannabinol (THC), el compuesto psicoactivo más conocido.
Sin embargo, se necesita más investigación para comprender completamente cómo el CBD y otros cannabinoides pueden afectar la función sexual.
En conclusión, si bien la marihuana puede tener efectos positivos para algunas personas en términos de relajación y placer, es importante tener en cuenta los posibles impactos negativos que puede tener en la salud sexual, especialmente con un uso frecuente y prolongado.
Si experimentas dificultades sexuales relacionadas con el consumo de marihuana, considera hablar con un profesional de la salud para obtener orientación y apoyo adecuados.
