Los terpenos de cannabis son compuestos aromáticos que desempeñan un papel crucial en la supervivencia y la adaptación de las plantas al entorno. Estos compuestos no solo son responsables de los aromas y sabores característicos de diversas especies vegetales, sino que también cumplen funciones esenciales para la protección y reproducción de la planta. Los terpenos cannabis ayudan a las plantas a repeler insectos y plagas, además de atraer polinizadores, creando una barrera natural frente a amenazas externas.
En el caso del cannabis, los terpenos influyen en sus propiedades aromáticas y en la experiencia de consumo, interactuando también con otros compuestos como los cannabinoides.
¿Por qué se producen terpenos en el cannabis?
Los terpenos son compuestos aromáticos esenciales para la supervivencia de muchas plantas, incluidas las de cannabis. Más allá de proporcionar el aroma y sabor característicos de cada variedad, los terpenos actúan como una defensa natural.
El aroma penetrante que emiten permite a las plantas repeler plagas no deseadas, al tiempo que atraen a insectos beneficiosos, como los polinizadores. Esta dualidad es vital en el entorno natural de la planta, pues le permite protegerse y asegurar su reproducción.
Terpenos y cultivo de marihuana: ¿Cómo se producen en el cannabis?
La cantidad y el tipo de terpenos que produce una planta de cannabis están influenciados por varios factores. Aunque una misma variedad podría generar un perfil de terpenos similar, aspectos como el clima, el tipo de suelo, los fertilizantes utilizados, la edad de la planta y otros factores pueden modificar la producción y concentración de estos compuestos aromáticos.
Actualmente, se han identificado más de 100 tipos de terpenos en el cannabis, y cada variedad de planta presenta su propia combinación de estos compuestos en diferentes concentraciones. Esto contribuye a la diversidad de aromas, sabores y efectos entre distintas variedades de cannabis.
Terpenos y efectos en el cannabis
Uno de los aspectos más fascinantes de los terpenos es su capacidad para influir en los efectos del cannabis. A través de un fenómeno conocido como “efecto séquito,” los terpenos actúan de forma sinérgica con los cannabinoides, como el THC y el CBD, potenciando o modulando sus efectos. Por ejemplo, algunas cepas de cannabis con niveles similares de THC y CBD pueden provocar experiencias diferentes debido a su perfil de terpenos.
- Interacción con Cannabinoides: Los terpenos como el limoneno, el cariofileno y el pineno, cuando se combinan con el THC, pueden intensificar sus efectos o brindar beneficios específicos. Asimismo, el CBD y el linalool parecen tener una relación especial que contribuye a un efecto calmante y relajante.
- Efectos Independientes: Aunque los terpenos son famosos por potenciar el efecto de los cannabinoides, también actúan de forma independiente, brindando efectos únicos. Numerosos estudios han documentado los efectos individuales de los terpenos, como el pineno, que es conocido por sus propiedades energizantes, o el mirceno, que tiene un efecto sedante.
¿Por qué son importantes los terpenos en el cannabis?
La producción de terpenos en las plantas de cannabis es una estrategia adaptativa compleja que va más allá de los aromas y sabores. Los terpenos no solo son fundamentales en la protección y polinización de la planta, sino que también influyen directamente en los efectos que experimentan los consumidores de cannabis, especialmente cuando actúan en conjunto con los cannabinoides.
¿Cómo aumentar la producción de terpenos en el cannabis?
La producción de terpenos en el cannabis es influenciada tanto por la genética como por el ambiente. Mientras que la genética define el perfil y potencial de terpenos de una cepa, el entorno en el que se cultiva puede aumentar o disminuir su concentración. Los criadores seleccionan combinaciones de terpenos para desarrollar cepas únicas, pero los cultivadores pueden potenciar la cantidad de terpenos mediante prácticas específicas de cultivo.
Factores ambientales que aumentan los terpenoides en el cannabis
Los factores ambientales juegan un papel fundamental en la maximización de los terpenos. Optimizar estos factores puede mejorar el sabor, aroma y efectos de las flores, resultando en una experiencia de consumo más rica y potente. A continuación, se describen los métodos clave para aumentar los niveles de terpenos en el cannabis:
1. Aplicación de estrés adecuado
Un nivel controlado de estrés, como la técnica de estrés por luz y temperatura, puede estimular la producción de terpenos. Este tipo de estrés debe aplicarse con cautela, ya que el exceso puede ser perjudicial. Técnicas como la poda y el entrenamiento de bajo estrés (LST) pueden ayudar a la planta a desarrollar más terpenos al forzar un crecimiento más robusto.
2. Iluminación correcta
La exposición a la luz UV-B en las últimas semanas de floración se ha relacionado con un aumento de terpenos. Las lámparas de alta intensidad, como las LED de espectro completo, son ideales para este propósito. Sin embargo, es crucial monitorear la distancia y el tiempo de exposición para evitar dañar la planta.
3. Control de temperatura
Mantener una temperatura óptima entre 20°C y 26°C ayuda a maximizar los terpenos. Las temperaturas superiores a los 28°C pueden evaporar los terpenos volátiles, reduciendo el aroma y sabor de la flor. Un descenso leve en las temperaturas nocturnas también puede estimular la producción de terpenos, pero debe mantenerse de forma controlada.
4. Lavado de raíces antes de la cosecha
El lavado de raíces en la etapa final de floración ayuda a eliminar los residuos de nutrientes, mejorando el sabor natural de la planta y resaltando los terpenos. Este proceso, que dura de una a dos semanas, ayuda a purificar la planta antes de la cosecha, intensificando su perfil de sabor.
5. Secado y curado adecuados
Después de la cosecha, el proceso de secado y curado es fundamental para preservar los terpenos. Secar las flores en un ambiente controlado (con temperatura de 18-21°C y una humedad relativa del 45-55%) permite que los terpenos se mantengan intactos. El curado lento en frascos herméticos durante varias semanas permite que los terpenos maduren y se estabilicen, realzando aún más el aroma y sabor.