La dermatitis atópica, comúnmente conocida como eczema, es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se caracteriza por síntomas como picazón intensa, enrojecimiento y sequedad de la piel, lo que puede afectar significativamente la calidad de vida de quienes la padecen. Aunque existen diversos tratamientos disponibles, muchos pacientes buscan alternativas naturales debido a los efectos secundarios de las terapias convencionales.
En este contexto, el cannabis ha emergido como una posible opción terapéutica para el manejo de la dermatitis atópica. Los compuestos activos del cannabis, conocidos como cannabinoides, han mostrado propiedades antiinflamatorias, analgésicas y antipruríticas en varios estudios.
Pero ¿Cuál es la relación entre el cannabis y la dermatitis atópica? Analicemos cómo los cannabinoides pueden influir en esta enfermedad de la piel y qué dice la investigación científica al respecto.
El aceite de semillas de cáñamo y las enfermedades de la piel
La aplicación de diversos aceites y emolientes, como vaselina, cera de abejas, aceite de almendras, aceite de oliva y preparaciones sintéticas, ha demostrado ser eficaz para reducir los síntomas de la psoriasis y la dermatitis. Estas enfermedades se caracterizan por una piel excesivamente seca, por lo que los productos que pueden hidratar y prevenir una mayor irritación son esenciales para su tratamiento.
En condiciones como el eccema y la psoriasis, la piel seca es consecuencia de una pérdida excesiva de agua transepidérmica, y la inflamación persistente compromete la capacidad de la piel para actuar como barrera, regulando la difusión y la evaporación.
El aceite de semillas de cáñamo, junto con otros aceites naturales, ofrece una solución potencialmente efectiva. Este aceite es rico en ácidos grasos poliinsaturados (PUFAs), los cuales son conocidos por sus propiedades para reducir el prurito y la inflamación de la piel de manera más eficaz que los productos hidratantes con bajos niveles de PUFAs. El ácido linoleico, en particular, se ha destacado por su potencial beneficio, aunque también se están investigando otros PUFAs.
¿Por qué es bueno el aceite de cannabis en la piel?
El aceite de semillas de cáñamo no solo proporciona hidratación directa, sino que también contiene compuestos que pueden ayudar a controlar el desequilibrio subyacente en enfermedades de la piel como la psoriasis y la dermatitis.
Este aceite de cannabis en la piel ofrece una fuente rica en nutrientes que puede mejorar la salud de la piel, restaurar su función de barrera y reducir la irritación y la inflamación.
Al incorporar el aceite de semillas de cáñamo en el cuidado de la piel, se puede abordar la sequedad y la inflamación de manera efectiva, ofreciendo un alivio significativo para quienes padecen estas afecciones. Este enfoque natural y nutritivo es cada vez más reconocido por sus beneficios terapéuticos, convirtiéndose en una opción prometedora en el tratamiento de enfermedades de la piel.
Crema para dermatitis: los cannabinoides y la salud cutánea
Se ha demostrado que tanto el eccema como la psoriasis responden favorablemente a tratamientos ricos en ácidos grasos poliinsaturados (PUFAs). Estos PUFAs están ampliamente disponibles y se pueden obtener de diversas fuentes, siendo el aceite de semillas de cáñamo una fuente particularmente abundante con una proporción generalmente favorable.
Por otro lado, los cannabinoides se encuentran casi exclusivamente en el cannabis y han demostrado tener un efecto significativo sobre las enfermedades crónicas de la piel. Los cannabinoides participan en la regulación de la inflamación, lo que parece ser clave para su capacidad de tratar el eccema y la psoriasis.
El tracto gastrointestinal, al igual que la piel, es una de las principales barreras físicas del sistema inmune y contiene abundantes receptores cannabinoides. Una investigación de 2009 indica que la piel también posee un sistema endocannabinoide propio, que ayuda a regular la producción de varias hormonas y proteínas, incluidas las citoquinas, que participan en la respuesta inmune, así como diversos procesos celulares como la proliferación, la diferenciación y la apoptosis (muerte celular).
El desequilibrio de este sistema endocannabinoide puede ser responsable de la aparición de afecciones crónicas de la piel, como la psoriasis y el eccema. Desarrollar terapias específicas a base de cannabinoides puede ayudar a controlar estas condiciones.
Cannabis en la piel: ¿Qué dice un estudio?
En un estudio publicado en 2007, se demostró que el THC, el CBD, el CBN, el CBG y la anandamida mostraban un cierto nivel de eficacia en la inhibición de la producción de queratinocitos en la epidermis. Dado que el exceso de producción de queratinocitos está implicado en la psoriasis, estos resultados apoyan la investigación sobre terapias a base de cannabinoides para el tratamiento de esta enfermedad.
Además, se han encontrado receptores cannabinoides en las fibras nerviosas más pequeñas que controlan los folículos pilosos, y se ha comprobado que los queratinocitos se unen y metabolizan la anandamida, el endocannabinoide más prolífico.
En conclusión, los cannabinoides y los PUFAs juegan un papel crucial en el manejo de enfermedades crónicas de la piel como la psoriasis y el eccema. La investigación continua y el desarrollo de terapias basadas en estos compuestos prometen ofrecer nuevas y efectivas opciones de tratamiento para quienes padecen estas afecciones.
Efectos del CBD en la Psoriasis y Dermatitis Atópica: estudio clínico de 2019
Un ensayo clínico realizado en 2019 investigó el efecto terapéutico de una crema de CBD en pacientes con psoriasis y dermatitis atópica. Esta crema no solo contenía CBD, sino también otros compuestos naturales como manzanilla, caléndula y lavanda, aunque no contenía THC. En las cremas, no se recomienda el uso de CBD puro o aislado, sino su combinación con otras sustancias naturales debido al efecto sinérgico.
Resultados del Estudio
Los resultados mostraron que el tratamiento tópico con una crema enriquecida de CBD mejoró significativamente los parámetros y síntomas de la piel. No se documentaron reacciones irritantes o alérgicas durante el período de tratamiento.
La administración tópica de pomada de CBD, sin THC, se reveló como una alternativa no invasiva, segura y eficaz para mejorar la calidad de vida de los pacientes con algunos trastornos de la piel, especialmente aquellos con un fondo inflamatorio.
Mejoras Observadas
- Hidratación de la piel: se puede observar que los niveles de hidratación de la piel aumentaron significativamente en los pacientes después de usar la crema de CBD.
- Elasticidad de la piel: también hubo una mejora notable en la elasticidad de la piel, otro problema común en pacientes con dermatitis atópica.
Conclusión
El estudio concluye que el uso de una crema de CBD combinada con otros ingredientes naturales puede ser una opción efectiva para tratar afecciones cutáneas como la psoriasis y la dermatitis atópica. Este tratamiento tópico no invasivo mejora la calidad de vida de los pacientes sin causar reacciones adversas, destacando el potencial del CBD como un componente clave en el cuidado de la piel.
