Cultivos transgénicos y marihuana
Dado que el cannabis sativa, la definición taxonómica tanto para la marihuana recreativa como para el material de origen del CBD, es el producto agrícola más popular de los Estados Unidos, puede ser que nos preguntemos si como si en muchas otras de sus industrias, ¿existe el cannabis transgénico?
Criar cuidadosamente cultivos o animales para reducir o eliminar ciertos rasgos y magnificar otros, es algo que se hace desde hace mucho tiempo.
Algunos lugares, regiones y comunidad prefieren prohibir los cultivos transgénicos, mientras otras, principalmente Estados Unidos, producen y consumen productos alimenticios perfeccionados en el laboratorio.
La cría selectiva sucede en este mismo momento en la industria de la marihuana. Y esto pasa desde siempre, ya que es básicamente lo que hacen los criadores y los bancos de semillas. Y durante los últimos años, se puede buscar en el INASE (Argentina), o en la base de datos de la Oficina de Marcas y Patentes de EE. UU., para encontrar solicitudes de patentes para cepas de cannabis patentadas. Esto significa que hay científicos de plantas, botánicos y cultivadores que intentan encontrar la variedad estrella y utilizan todos los medios necesarios para hacerlo.
En casi todas las industrias, incluidas las del cannabis, los grandes productores buscan mejores plantas, que den grandes producción, sean resistentes y resilientes, y se puedan producir en masa.
El proceso para crear versiones modificadas genéticamente de las sustancias químicas que se encuentran en el cannabis, conocidas como cannabinoides, en realidad no implica cambiar la planta en sí.
Los científicos que modifican cannabis en laboratorios, alteran genéticamente la levadura fermentada, un proceso comparable a la creación de perfumes sintéticos a partir de sustancias químicas contenidas dentro de las flores, para construir copias de las hebras de ADN que se encuentran en el cannabis. La levadura actúa como una pequeña fábrica para producir cannabinoides en el laboratorio.
Sustancias químicas en la marihuana
El THC y el CBD son los dos cannabinoides más famosos, pero la planta de cannabis contiene más de 100 sustancias químicas diferentes, muchas de las cuales apenas han sido estudiadas. Los científicos pueden diseñar el material genético creado a partir de la levadura para exhibir propiedades específicas, como un medicamento que es prácticamente CBD puro.
Las instalaciones de la compañías que trabajan con cannabis genéticamente modificando, parecen un cruce entre un laboratorio científico tradicional y una microcervecería «elegante», con grandes tanques que contienen levadura utilizada en el proceso de modificación genética.
Ese proceso para producir THC, CBD y otros cannabinoides en un laboratorio es mucho más económico y eficiente que cultivar plantas, según quienes lo producen.
Algunas empresas, como Hyasynth Bio, ya obtuvieron patentes para una planta de cannabis transgénica que mejora el rendimiento y el crecimiento de las semillas y un plan de cáñamo transgénico que es más tolerante a la sal.
Hay otras patentes pendientes para nuevas alteraciones genéticas del cannabis, que incluyen:
-Un producto de cáñamo transgénico que aumenta la resistencia a plagas en las plantas.
-Una planta de cannabis transgénica resistente al calor.
-Plantas de cannabis tolerantes a la sequía.
-Una célula de cannabis transgénica que altera la forma en que la planta de cannabis produce ácidos grasos
poliinsaturados.
¿Qué son los transgénicos y ejemplos?
Los transgénicos, también conocidos como organismos genéticamente modificados (OGM), son organismos cuyo material genético ha sido alterado mediante técnicas de ingeniería genética. Estas modificaciones consisten en la introducción de genes de una especie en el genoma de otra, con el objetivo de conferirle características específicas.
Existen diversos ejemplos de transgénicos en la agricultura. Uno de ellos es el maíz Bt, que ha sido modificado para contener genes de la bacteria Bacillus thuringiensis. Estos genes codifican para proteínas tóxicas que son efectivas contra ciertas plagas del maíz, reduciendo la necesidad de utilizar insecticidas. Otro ejemplo es la soja Roundup Ready, que ha sido modificada para ser resistente al herbicida glifosato. Esto permite que los agricultores apliquen este herbicida sin dañar las plantas de soja, facilitando el control de malezas.
El algodón Bt es otro ejemplo de cultivo transgénico. Este algodón contiene genes de Bacillus thuringiensis que le confieren resistencia a plagas como el gusano del algodón, disminuyendo la necesidad de utilizar insecticidas. Además, la papaya Rainbow es una variedad de papaya transgénica desarrollada para resistir el virus de la mancha anular de la papaya, protegiendo así la industria papayera.
El tomate Flavr Savr fue uno de los primeros alimentos transgénicos comercializados. Fue modificado genéticamente para tener una vida útil más larga y una textura más firme, lo que facilita su transporte y comercialización. Estos son solo algunos ejemplos de cultivos transgénicos, pero existen muchos otros en desarrollo y producción en diferentes partes del mundo, cada uno con características específicas adaptadas a las necesidades de los agricultores y consumidores.
¿Deberíamos cultivar marihuana genéticamente modificada?
La cuestión de cultivar marihuana genéticamente modificada es un tema complejo y sujeto a diferentes perspectivas. Actualmente, existen investigaciones en curso sobre la genética de las variedades de marihuana con el fin de mejorar su resistencia a enfermedades, aumentar su producción y mejorar su perfil de cannabinoides. Sin embargo, el cultivo de marihuana genéticamente modificada plantea consideraciones éticas, legales y medioambientales.
En términos de la definición de transgénico, la marihuana genéticamente modificada sería considerada como tal, ya que implica la alteración del material genético de la planta. No obstante, es importante señalar que las semillas transgénicas de marihuana no están ampliamente disponibles en el mercado debido a restricciones legales en muchos países.
Dado el debate en torno a los cultivos transgénicos en general, es necesario considerar los posibles impactos en la salud humana, el medio ambiente y la biodiversidad antes de decidir si se deben cultivar variedades de marihuana genéticamente modificada. También es importante evaluar los aspectos legales y reglamentarios que rodean la producción y el uso de este tipo de plantas.
En conclusión, la discusión sobre el cultivo de marihuana genéticamente modificada es un tema en evolución y está sujeto a consideraciones éticas, legales y medioambientales. Se requiere una evaluación cuidadosa de los posibles beneficios y riesgos antes de tomar decisiones al respecto.
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