Cannabis medicinal para el cáncer de mama

Antes de hacer cualquier tipo de tratamiento, ya sea como paciente de cáncer o cualquier otra patología, recomendamos y alentamos consultar con un médico.

El THC y el CBD tienen diferentes efectos en el cuerpo. El THC ayuda a aliviar el dolor y tiene propiedades antieméticas. Con estas características, el THC puede ser utilizado por pacientes con cáncer como analgésico. Es importante saber que el cannabinoide THC es psicotrópico, por lo que puede alterar mentalmente al paciente que lo consume.

Si un paciente experimenta convulsiones inducidas por cáncer, puede usar CBD para ayudar a controlar los síntomas. El cáncer es una enfermedad grave cuyo diagnóstico provoca ansiedad y en ocasiones paranoia. Muchos pacientes se deprimen debido a la tensión física, mental, emocional y financiera de luchar contra el cáncer. El CBD puede ayudar a reducir el estrés y la depresión, lo que permite a los pacientes mantener la calma.

Derrotar la depresión en un paciente con cáncer es vital para el éxito del tratamiento porque sufrir de ambas cosas hace que la recuperación sea mucho más difícil. En caso de que un paciente haya usado THC para las náuseas o el dolor, y experimente una alteración mental no deseada, puede usar CBD para revertir los efectos y volver a la sobriedad.

Algunas investigaciones que todavía se encuentran en el nivel preclínico indicaron que el CBD puede ayudar a inhibir el crecimiento de tumores. Tal capacidad, si se demuestra en ensayos clínicos, contribuiría enormemente a revertir el progreso del cáncer.

Algunas cepas de marihuana tienen un alto contenido de THC, mientras que otras tienen un alto contenido de CBD, pero es difícil decir cuál de las cepas es la mejor marihuana para el cáncer de mama. Sin embargo, cabe destacar que el CBD ayuda a aliviar más síntomas que el THC.

Cannabinoides y cáncer de mama

Según la investigación, el THC, el CBD y otros cannabinoides demostraron la capacidad de obstaculizar el progreso de los tumores en el cáncer de mama. Los mismos reducen dicha progresión al conectarse con los receptores de cannabinoides en las células cancerosas.

También hay otras formas en que estos cannabinoides previenen el crecimiento de tumores sin la participación de receptores. Al trabajar en las vías de señalización celular que facilitan el crecimiento del cáncer, las vías celulares evitan que los tumores en la mama hagan metástasis. También pueden ayudar a evitar la necrosis tumoral, principalmente cuando se aplica regularmente de manera tópica para el cáncer de mama.

Los modelos de cáncer de mama animal utilizados en las investigaciones indican que los cannabinoides son útiles tanto en los cánceres de mama receptores de estrógenos como en los resistentes a los estrógenos. No se realizaron pruebas similares en seres humanos, pero existe una buena posibilidad de que los cannabinoides funcionen de la misma manera en los seres humanos.

El optimismo se basa en el hecho de que los cannabinoides interactúan de la misma manera en humanos y animales utilizados en los ensayos. Por lo tanto, se concluye que se puede probar la marihuana medicinal para el tratamiento del cáncer de mama.

Qué esperar al usar marihuana medicinal para tratar el cáncer de mama

La marihuana medicinal tiene algunos efectos secundarios. En algunas personas, el CBD puede causar somnolencia. En sus formas más severas, esta somnolencia puede hacer que solo tengas ganas de dormir todo el día.

Si el aceite de marihuana, la cápsula, el comestible, o el vaporizador que se tome tiene un alto contenido de THC, es posible que se experimente euforia o episodios psicóticos inmediatamente después de su uso.

Otro efecto común de la marihuana medicinal es la sequedad de boca. En las primeras etapas de uso, los cannabinoides inhiben las glándulas salivales sublinguales evitando que produzcan saliva. Este problema, sin embargo, desaparece con el tiempo.

¿Cómo ayuda el cannabis a las personas con cáncer?

El cannabis ha despertado interés en el ámbito médico por sus posibles beneficios para las personas con cáncer. Aunque la investigación sobre este tema está en curso y se requiere más evidencia científica, se han observado algunos efectos potenciales. Una de las áreas en las que se ha investigado es el alivio del dolor, ya que algunos componentes del cannabis, como el THC y el CBD, pueden tener propiedades analgésicas. Además, el cannabis puede ayudar a controlar las náuseas y vómitos causados por la quimioterapia, lo que puede mejorar la calidad de vida de los pacientes. Otro posible beneficio es su capacidad para estimular el apetito, lo que podría ser beneficioso para quienes experimentan pérdida de apetito debido al cáncer o a los tratamientos. También se ha observado que el cannabis puede tener efectos positivos en el estado de ánimo y reducir la ansiedad en algunos pacientes. Sin embargo, es importante destacar que el uso de cannabis en el contexto del cáncer debe ser discutido con el equipo médico, ya que existen consideraciones individuales y posibles interacciones con otros medicamentos. Además, los productos de cannabis deben obtenerse de fuentes confiables y cumplir con los estándares de calidad. La decisión de utilizar cannabis como parte del tratamiento del cáncer debe ser cuidadosa y basada en la evaluación de los riesgos y beneficios, siempre bajo la supervisión de profesionales de la salud especializados en oncología.

¿Qué enfermedades se pueden tratar con el cannabis?

El cannabis medicinal ha demostrado ser beneficioso en el tratamiento de varias enfermedades y afecciones médicas. Se ha utilizado para aliviar el dolor crónico en condiciones como la artritis, la fibromialgia y la neuropatía.

Los cannabinoides presentes en el cannabis, como el THC y el CBD, pueden tener propiedades analgésicas y antiinflamatorias que ayudan a reducir el dolor y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Además del dolor crónico, el cannabis medicinal también se ha estudiado en el tratamiento de enfermedades como la esclerosis múltiple, la epilepsia refractaria, el síndrome de Tourette y el trastorno de estrés postraumático (TEPT). Se ha observado que los cannabinoides pueden tener efectos anticonvulsivos, neuroprotectores y ansiolíticos, lo que puede proporcionar alivio a los pacientes que sufren de estas condiciones.

Sin embargo, es importante destacar que el uso de cannabis medicinal debe ser bajo la supervisión de profesionales de la salud y de acuerdo con las regulaciones y leyes aplicables en cada país. Cada caso debe ser evaluado individualmente, considerando los riesgos y beneficios, así como las posibles interacciones con otros medicamentos que el paciente pueda estar tomando.

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