El cultivo de marihuana a partir de clones es una técnica popular entre cultivadores que buscan reproducir plantas con características específicas y mantener la uniformidad en su cosecha. Sin embargo, los clones, que son esencialmente plantitas jóvenes obtenidas de un ejemplar madre, requieren cuidados especiales para asegurar su desarrollo saludable y exitoso. Estos cuidados básicos son cruciales para garantizar que los clones se adapten bien a su nuevo entorno y crezcan vigorosamente.

En esta guía, abordaremos los aspectos fundamentales para el cuidado de clones de plantas de marihuana, incluyendo la preparación del ambiente adecuado, las necesidades nutricionales y de agua, y las prácticas de manejo para fomentar un crecimiento óptimo.

¿Qué es la clonación en el cultivo de cannabis?

La clonación en el cultivo de cannabis es un proceso especializado que permite reproducir plantas con características específicas al tomar esquejes de una planta madre. Este método, ampliamente utilizado por cultivadores que buscan mantener la consistencia en sus cultivos, involucra cortar una rama de la planta madre, preferiblemente un brote joven con hojas nuevas en el extremo.

El objetivo es hacer que el corte desarrolle raíces y se convierta en una nueva planta completa.

Al clonar una planta hembra marihuana, garantizamos que todos los esquejes obtengan el mismo ADN que la planta madre, resultando en plantas con características de crecimiento, sabor y efecto idénticas. Esto es especialmente valioso en el cultivo de cannabis, donde los cultivadores buscan replicar con precisión las cualidades deseadas, algo que puede ser más incierto cuando se cultivan a partir de semillas, incluso con las variedades más estables.

Elegir una planta madre para clonación de cannabis

Seleccionar una planta madre adecuada es crucial para el éxito del proceso de clonación. Este paso es esencial, ya que se busca preservar y multiplicar las características genéticas valiosas de la planta original, ampliando así su vida útil y garantizando la calidad de futuras cosechas.

Para elegir la planta madre ideal, los cultivadores y criadores deben considerar varios factores clave:

  • Productividad: La capacidad de la planta para producir una cantidad significativa de cosecha.
  • Altura: La estatura final de la planta, que puede afectar la gestión del espacio y el cultivo.
  • Velocidad de Crecimiento: La rapidez con la que la planta se desarrolla desde el germen hasta la madurez.
  • Potencia: La concentración de cannabinoides y otros compuestos activos que influyen en el efecto de la planta.
  • Tiempo de Floración: La duración del ciclo de floración, que afecta el tiempo total desde la siembra hasta la cosecha.
  • Sabor y Efecto: Las características organolépticas y los efectos que ofrece la planta.

Adicionalmente, algunas características de nicho, como altos niveles de CBD (cada vez más demandados en el ámbito medicinal) o la tolerancia al frío (importante para cultivadores en regiones más frías), pueden ser relevantes para la elección de la planta madre.

Cuando se cultivan plantas a partir de semillas, es difícil predecir cómo se comportará una planta potencialmente madre hasta que alcance la floración. Por ello, es recomendable tomar esquejes de las plantas cultivadas a partir de semillas que han pasado unas semanas en el período vegetativo.

Estos esqueje de marihuana deben ser enraizados y luego sometidos a un ciclo de luz de 12/12 para inducir la floración. De esta manera, se puede evaluar la calidad de los esquejes y, posteriormente, mantener a las madres más prometedoras en condiciones de crecimiento vegetativo para continuar obteniendo nuevos clones.

Mantenimiento de un esqueje marihuana

Para garantizar el éxito en la clonación de cannabis, es esencial mantener condiciones ambientales específicas para los esquejes. Estos deben ser cuidados con atención para asegurar un enraizamiento saludable y un crecimiento óptimo.

Condiciones Ambientales Ideales

  1. Temperatura: Los esquejes deben mantenerse a una temperatura constante que oscile entre 20° C y 26° C. Este rango de temperatura favorece el desarrollo adecuado de las raíces y el crecimiento saludable de los clones.
  2. Humedad Relativa: La humedad relativa es crucial para los esquejes. Inicialmente, debe estar entre el 90% y el 100% para prevenir la deshidratación y fomentar el enraizamiento. Después de los primeros dos o tres días, se puede reducir gradualmente la humedad, pero nunca debe bajar del 60-70%.

Consideraciones según el tipo de cannabis

El cannabis se clasifica en tres subtipos principales: sativa, índica y ruderalis. Aunque estas categorías pueden influir en los requisitos específicos de los esquejes, la mayoría de las variedades comerciales están hibridadas, y su linaje genético puede ser incierto. Por lo tanto, es posible que necesites experimentar para encontrar las condiciones óptimas para cada variedad específica. Prepárate para perder algunos clones mientras ajustas las condiciones para cada tipo de planta.

Prevención del moho y otros problemas

El cannabis es propenso a problemas de pudrición y moho, como el oídio y el botrytis (moho gris). Para prevenir estos problemas, sigue estos consejos:

  • Humedad y Temperatura: Mantén la humedad lo suficientemente alta para que los tejidos vegetales se mantengan hidratados, pero controla cuidadosamente para evitar la aparición de moho. Asegúrate de que la humedad no sea excesiva, ya que un medio de cultivo demasiado húmedo puede causar la pudrición de los tallos.
  • Circulación del Aire: Una buena circulación del aire es vital para prevenir el moho. Utiliza un pequeño ventilador para mover el aire alrededor de los esquejes, lo que ayuda a eliminar el aire saturado y proporciona aire fresco a los tallos y hojas.
  • Prevención de Pudrición: Si los tallos empiezan a pudrirse, ya sea debido a un agente fúngico como el botrytis o al exceso de agua, es mejor descartar los clones afectados. La pudrición suele ser irreversible y puede comprometer el éxito de tu cultivo.

Al seguir estas pautas, puedes aumentar las probabilidades de éxito en la clonación de cannabis, garantizando un crecimiento robusto y saludable para tus futuras plantas.

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