¿Cuales son las mejores condiciones para las plántulas?

El cultivo puede iniciarse con una semilla o un esqueje, pero sea cual sea la elección del cultivador nuestra planta de cannabis primero, será una plántula

Hay ciertos beneficios que podemos tener de iniciar nuestros cultivos a partir de semillas. Si compras un pack de semillas, su valor puede ser parecido al de una sola plántula, lo que hace que la compra del pack, sea más barato a la larga. Otro beneficio de cultivar desde semillas es que tenemos más opciones de cultivar distintas variedades. Si usamos un esqueje, viene de una planta madre con una genética especifica, distintas semillas nos pueden dar diferentes variedades. Por último, la semilla nos permite iniciar el proceso de cero y nos aseguramos de que la plántula no tenga residuos químicos o plagas ajenas. Comenzar desde la semilla le brinda un mayor control de calidad sobre las plántulas.

Las plantas se consideran plántulas aproximadamente 2-3 semanas después de la germinación. Durante este tiempo, la planta tiene que estar en un lugar con sol directo, si se cultiva al aire libre. Si cultivamos en interior, necesitamos configurar las luces de cultivo para que estén encendidas durante -por lo menos- 18 horas al día.

El cuidado de las plántulas después de la germinación no es difícil, pero la atención a cosas como la humedad, la nutrición, la temperatura, el agua, la luz y el trasplante nos van a garantizar plántulas fuertes y sanas.

Humedad y temperatura

Las plántulas no crecen bien en temperaturas extremas. Lo mejor es encontrar una temperatura estable de alrededor de 23-25ºC en el cuarto de cultivo. Si las temperaturas aumentan demasiado, las plántulas de cannabis pueden tener dificultades para absorber suficiente agua a través de sus raíces y pueden marchitarse. Si la temperatura es demasiado fría, el crecimiento se reduce y eventualmente se detiene.

Las plántulas de cannabis pueden tolerar niveles altos de humedad de alrededor del 60% o más. La humedad se puede absorber a través de las hojas, esto es útil si está cultivando esquejes o plántulas con sistemas de raíces subdesarrollados.

Iluminación

La iluminación en plántulas de cannabis no necesita ser muy potente. El horario de luz de las plántulas de cannabis es de 18 horas de luz diaria normalmente, ya sea que cultives semillas autoflorecientes, semillas feminizadas fotoperiódicas, o esquejes. Algunos cultivadores utilizan 20 horas de luz diaria o incluso 24 horas. Esto esta bien siempre y cuando se cambie el ciclo de luz durante la etapa vegetativa o de crecimiento. 

Trasplante

Una indicador que podemos usar a la hora de trasplantar es el crecimiento de las hojas de nuestra plántula. La plantilla tiene que estar en un recipiente o macetas para plántula, que son de un tamaño especifico y mas bien pequeños. Una vez que las hojas hayan alcanzado el mismo diámetro que el recipiente o maceta, es un buen momento para trasplantar. El trasplante de la plántula tiene que ser suave y cuidadoso, ya que durante esta etapa la planta es frágil.

Riego

Las plántulas necesitan muy poca agua porque tienen una tasa de transpiración baja. Además, el sistema radicular pequeño e inmaduro en la etapa de plántula de cannabis es incapaz de absorber grandes cantidades de agua.

Plántulas de cannabis saludables vs. no saludables

Una plántula de cannabis enferma puede tener hojas amarillas o descoloridas. También podemos notar que la plántula de cannabis no está creciendo. Lo mejor es compararla con otras plántulas y si vemos que luce diferente y desmejorada, seguramente no este saludable. Los problemas pueden provenir de una variedad de fuentes ambientales y pueden estar relacionados con la iluminación, la nutrición, las temperaturas, el pH, el riego o las plagas.

Un sustrato aireado y liviano es indispensable para un buen crecimiento de nuestra plántula, y en esa etapa no necesitamos agregar nutrientes ya que el suelo tiene todo lo que nuestra pequeña planta necesita.