Fumar cigarrillos es una de las principales causa de muerte prevenible en el mundo, pero sigue siendo uno de los hábitos más difíciles de abandonar.

La nicotina es una sustancia adictiva. Entonces, al dejar de fumar, se empiezan a experimentar sensaciones incómodas que se denominan síntomas de abstinencia. Estos síntomas pueden ser: deseos intensos de nicotina, náuseas, insomnio, ansiedad e irritabilidad, depresión, aumento de peso y dolores de cabeza, entre otros. 

Los síntomas de abstinencia comienzan dentro de las primeras 24 horas después de fumar por última vez. Generalmente, alcanzan su punto máximo al tercer día y luego disminuyen gradualmente en intensidad. La abstinencia no es para siempre, pero puede ser increíblemente desagradable y durar hasta 3 o 4 semanas.

Antes de analizar cómo el CBD puede ayudar con la adicción a las drogas, hay que mencionar brevemente el sistema endocannabinoide (ECS). Este sistema tiene un papel esencial en la regulación de los procesos de nuestro cuerpo y el mantenimiento de la homeostasis. El SEC regula los efectos gratificantes de las drogas adictivas, y el CBD interactúa con el ECS para producir efectos variados, uno de los cuales es ayudar a reducir la adicción a las drogas. Dicho de otra manera, el CBD puede interrumpir o modificar la forma en que el cuerpo interpreta esas drogas adictivas para que no parezcan tan gratificantes. 

¿Qué es el CBD?

CBD es la abreviatura de cannabidiol, el segundo cannabinoide que mas se encuentra en la planta de cannabis. También es el cannabinoide más frecuente en la subespecie del cáñamo, por lo que se puede encontrar en muchos productos de CBD derivados del cáñamo. Aunque proviene de la planta de cannabis, el CBD no tiene ningún efecto intoxicante y ha demostrado su potencial como suplemento de bienestar a través de numerosos estudios sobre diversas condiciones de salud mental y física.

Por lo tanto, puede que no sorprenda que el CBD pueda ayudar a aliviar algunos de los desafíos de dejar el tabaco.

Un estudio de 2013 realizado por el University College London demostró el potencial del CBD para ayudar a los fumadores a dejar de consumir tabaco. En el estudio, se les administró a 24 fumadores, un inhalador de CBD o un inhalador con un placebo. Se les dijo que usaran el inhalador cuando tuvieran ganas de fumar. Al final del estudio de una semana, los que recibieron el inhalador de CBD fumaban un 40% menos de cigarrillos.

Otro estudio analizó el efecto del CBD en los aspectos de la química cerebral de la adicción al tabaco. Los participantes que recibieron 800 mg de CBD por vía oral mostraron menos «sesgo de atención» (es decir, prestaron menos atención) a las imágenes relacionadas con cigarrillos y tabaco que los que recibieron un placebo. El grupo de CBD, también calificó las imágenes relacionadas con el tabaco como menos agradables que el grupo de placebo.

Estos resultados sugieren que el CBD puede tener un efecto impactante en las vías cerebrales involucradas en la alteración de la adicción.

Volviendo a la abstinencia de nicotina, el CBD podría ayudar a aliviar esos síntomas de abstinencia tan pesados. El CBD puede disminuir la ansiedad, mejorar el sueño, aligerar el dolor y reducir las náuseas, entra otras. 

Cuanto más se estudia el CBD, más se descubre sobre las diferentes funciones corporales que ayuda a regular. Y, en consecuencia, se obtiene una mayor comprensión de cómo el CBD puede ayudar a los posibles no fumadores a convertirse en no fumadores reales.

Si pensas en probar una terapia con CBD para dejar de fumar lo mejor es elegir productos de CBD derivados del cáñamo. Si bien el CBD no es adictivo, los altos niveles de THC pueden serlo. Por eso, lo mejor es asegúrese de elegir CBD derivado del cáñamo, que tiene un contenido de THC inferior al 0,3 %.

¿Qué es más sano el CBD o el tabaco?

El CBD es considerado más saludable que el tabaco debido a que no contiene nicotina, la cual es altamente adictiva y puede causar dependencia en los usuarios. Además, el tabaquismo es una adicción reconocida que puede tener consecuencias graves para la salud, incluyendo enfermedades respiratorias y cardiovasculares, así como cáncer. La abstinencia del tabaco puede causar cambios físicos y emocionales en el cuerpo, incluyendo irritabilidad, ansiedad, fatiga y aumento del apetito. En cambio, el CBD no tiene efectos adictivos conocidos y se utiliza para tratar una variedad de problemas de salud, como dolor crónico, ansiedad y trastornos del sueño.

¿Qué tratamientos existen para dejar de fumar tabaco?

Existen varios tratamientos que pueden ayudar a dejar de fumar tabaco. Algunos de ellos son:

  1. Terapia de reemplazo de nicotina (NRT, por sus siglas en inglés): incluye parches, chicles, inhaladores y pastillas de nicotina que pueden ayudar a reducir los síntomas de abstinencia.
  2. Medicamentos recetados: como el bupropión y la vareniclina, que pueden reducir los antojos y los síntomas de abstinencia.
  3. Terapia cognitivo-conductual (TCC): puede ayudar a los fumadores a identificar y cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento que pueden estar contribuyendo a su adicción.
  4. Apoyo social: incluye grupos de apoyo, programas de ayuda en línea y terapia de pareja, que pueden proporcionar al fumador un sistema de apoyo para ayudarlos a dejar de fumar.

También es importante tener en cuenta que la adicción al tabaco es una enfermedad crónica y que puede requerir varios intentos para dejarlo por completo. Además, la mejor manera de dejar de fumar es a través de una combinación de métodos y estrategias personalizadas para cada persona, que aborden tanto los aspectos físicos como los emocionales de la adicción al tabaco.

Además de los beneficios obvios para la salud, dejar de fumar también puede tener un impacto positivo en la calidad de vida, el estado de ánimo y las relaciones interpersonales. Los efectos físicos de dejar de fumar pueden incluir una mejor respiración, una mayor capacidad de ejercicio y una reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares, entre otros.

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